El portavoz de EA en Gasteiz recuerda al PP que tanto la violencia como la imposición del pensamiento único son incompatibles con la democracia.   El portavoz de Eusko Alkartasuna en el Parlamento Vasco, Rafa Larreina, ha afirmado hoy que esta formación “al igual que no admitirá en el ámbito democrático a quienes utilizan la violencia, vulneran los derechos humanos y se niegan a rechazar estas prácticas tampoco lo hará a quien no se comprometa a acatar la voluntad de los ciudadanos vascos de superar las actuales cotas de autogobierno”. De esta manera, Larreina, cuestionaba la legitimidad del portavoz popular en la Cámara de Gasteiz, Jaime Mayor Oreja, para enarbolar la defensa de la democracia en Euskadi, “cuando el PP y su Gobierno, del que el mismo señor Mayor Oreja ha formado parte durante varios años, se niega a acatar los resultados electorales del pasado 13 de mayo, en los que se demuestra que los ciudadanos vascos exigen mayoritariamente el respeto de los derechos humanos, apoyan el diálogo como fórmula para resolver el conflicto vasco y abogan por alcanzar mayores cotas de autogobierno que las actuales”.

Para el parlamentario de EA en Gasteiz, acusaciones como las efectuadas por dirigentes del PP en los últimos dí­as contra formaciones nacionalistas vascas sólo evidencian las carencias democráticas del partido de Aznar, “que aún se muestra incapaz de acatar la voluntad mayoritaria de la ciudadaní­a vasca”. En opinión de Larreina, los avances del PP en materia democrática exigen su compromiso a respetar aspectos como la pluralidad los vascos y su derecho a defender cualquier ideario por cauces democráticos, aunque éste no sea de su agrado”. Según Larreina, “resulta absolutamente paradógico e inadmisible que quienes se autoproclaman demócratas sean precisamente quienes intentan imponer su pensamiento único, incumplen sistemáticamente el Estatuto de Gernika respaldado mayoritariamente por los ciudadanos vascos como uno de los intrumentos de autogobierno de la sociedad vasca, intentan criminalizar a quienes defienden democráticamente otros principios polí­ticos, acusan de colaboración con actuaciones violentas a personas y colectivos a quienes no se les aplica la presunción de inocencia, o se niegan a condenar todo tipo de violencias cuando parte de ellas, según han denunciado oraganizaciones internacionales como Amnistí­a Internacional, se producen en el ámbito de los aparatos del Estado”.

“Tampoco se puede ser democráta cuando se intenta deslegitimar a una institución, como el Parlamento Vasco, cuando las decisiones y debates que en ella se producen no resultan del interés polí­tico de esta formación”, ha añadido Larreina. Por ello, ha calificado como “democráticamente inadmisible” el intento, por parte del PP, de relacionar el autogobierno y el debate que al respecto se celebrará en próximos meses en la Cámara Vasca con la violencia. “Al igual que ETA, el señor Mayor Oreja sabe -ha subrayado Lareina- que Construcción Nacional y violencia son incompatibles y que desde el punto de vista polí­tico a quien más perjudica la violencia es al nacionalismo radicalmente democrático porque ETA es el principal obstáculo para avanzar en la Construcción Nacional”. Por ello, el portavoz de Eusko Alkartasuna ha avanzado que desde su formación se seguirá trabajando “en democracia y en las instituciones” desde el respeto más escrupuloso a los derechos humanos, al diálogo y a la decisión de los vascos, “respondiendo así­ al mandato de los vascos emitido a través de las urnas”.

Por Rafa

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