la ejecutiva está unida como «una piña» en favor del proceso y para reforzar el proyecto político
¿Cómo valora la iniciativa del sector crítico de poner en marcha un congreso extraordinario para revocar la decisión de no ir en coalición con el PNV?
En ílava los partidarios de esa posición tienen una presencia muy reducida, mientras que en Bizkaia las expectativas iniciales se están reduciendo de forma drástica. En Gipuzkoa tienen presencia. La Ejecutiva Nacional en su conjunto, es decir, 19 de los 20 que asistimos habitualmente, estamos unidos como una piña en que hay que seguir adelante con el proceso iniciado, es decir, respaldando y llevando a la práctica la decisión adoptada. Lo tenemos muy claro, de la misma forma que recoger firmas para pedir un congreso extraordinario es un derecho de los afiliados y no hay ninguna objeción. Sin embargo, la obligación de la Ejecutiva Nacional y de toda la militancia es reforzar el proyecto político de EA en la coyuntura tan importante en la que ahora estamos. La obligación de los afiliados es reforzar el proyecto y ver si determinadas actuaciones legítimas contribuyen a ese objetivo o pueden suponer una dificultad.
¿Sus promotores afirman que la diferencia de un sólo voto en la toma de una decisión de este calado no ofrece mucha legitimidad?
Hay que recordar que este tipo de decisiones siempre se toman en ese ámbito, tanto en sentido positivo como negativo. Cuando se habla de división en la Ejecutiva Nacional hay que decir que no existe, porque los 19 de los 20 miembros que somos estamos unidos y tenemos claro que es una decisión de todos. Hay un compromiso de llevarla adelante. La Ejecutiva Nacional ha estado reflexionando y analizando esta decisión desde diciembre de forma intensa y con gran responsabilidad. Es una decisión del conjunto de la Ejecutiva, que es de todos.
Insisten en que no es una decisión democrática al no haberse contado con las bases…
Es una decisión totalmente democrática porque está tomada de acuerdo con lo que prevén los estatutos y como la toman todos los partidos. Que yo sepa, el PNV, el PSOE, el PP no han consultado a sus bases si quieren ir solos o no. Han tomado la decisión los órganos que les corresponden, como en nuestro caso. Es una decisión democrática, tomada con responsabilidad y después de consultar.
¿No es sintomático que la presidenta del partido votase en contra de la mayoría de la ejecutiva?
La presidenta está con la mayoría de la ejecutiva y liderando el proceso. Lo que no puede ser es que la presidenta no tenga opinión. Eso sería grave y demostraría que no tiene capacidad. La presidenta tiene opinión y liderazgo. El liderazgo auténtico es aquel que es capaz de gestionar la complejidad. Lo que demuestra que un partido es serio es que cuando toma una decisión la lleva adelante.
¿La reacción de los alcaldes de EA de Gipuzkoa a favor de la coalición puede ser un elemento negativo?
Hacer ese tipo de manifestaciones públicas es una falta de respeto a la militancia y a los propios órganos del partido. Los cargos públicos lo son gracias a la militancia que les ha nombrado, apoyado, reforzado y defendido día a día en la calle. No se puede aprovechar este trabajo de la militancia para intentar forzar e imponer opiniones particulares, que se deben exponer de manera interna
¿Esta situación está proyectando una mala imagen de división interna en el partido?
La existencia de debates en el seno de los partidos no es malo para tomar posiciones. La cuestión es si tomadas esas decisiones se respeta esa voluntad democrática o, por el contrario, se buscan otro tipo de elementos para distorsionar esa situación. En cualquier otro partido habría sido inadmisible la posición de esos alcaldes, que no son todos, porque algunos tienen la sensación de haber sido sometidos a una encerrona. Los hubieran puesto de patitas en la calle. Nosotros tenemos un espíritu muy diferente y quizás un poco iluso, si se quiere, de respeto a la libertad de expresión. Lo que no se puede hacer y hay que decirlo claro, porque las bases no lo admitirían, es mantener ese tipo de actuaciones de manera indefinida. Una cosa es que no se actúe de manera stalinista a la primera de cambio y otra, que se vulneren de forma sistemática y continua los derechos de los afiliados y se menosprecie a la afiliación.
El ir en solitario puede dividir el voto nacionalista?
í‰se es un análisis falso. Si analizamos las distintas elecciones, la coalición sólo ha sumado en 2001. En el resto de las ocasiones, no ha funcionado para sumar más, sino probablemente menos. La experiencia dice que en las consultas que hemos ido por separado hemos sumado más. Y es que, en esta coyuntura en la que nos encontramos, hay gente con sensibilidad progresista que no digiere la coalición con el PNV y que se va a la abstención cuando concurrimos juntos. Ese electorado socialdemócrata, si EA se presenta en solitario, refuerza ese proceso en la batalla ideológica por el Estado de Bienestar. >carlos etxeberri
uy….pues a mi me han dicho otras cosas..
a mi me ha dicho gente que va conmigo a medios de formación, que hasta ahora se abstenía, pero que una vez lejos de vosotros nos vota… que suerte que va a tener EAJ-PNV que rasca votos en un electorado claramente no nacionalista…
Por cierto, ¿Quien va a ir de «alcalde» de Bilbao?
Iñaki Azkuna for president 😉
el comment anterior se refería por supuesto a la actual situación 😉
Pero eso es perfectamente normal, viendo tu web, si los que van contigo a «medios de formación» piensan como tu, son gente de derechas y autonomista. Es normal que ahora os voten.
Eso lo decidirán las bases, lógicamente esperemos que sea Jon Aritz Bengoetxea que tan buen trabajo está realizando.
jajajjaa
pues no, no soy de derechas. y no soy autonomista…
Soy independentista vasca, por eso estoy afiliada a EAJ-PNV, y mis medios de formación son similares a los de rafa, asi que…conseguir votos en ese ambiente, el sabe lo dificil que es…
buen trabajo? anda por Dios…
Menos mal que a Azkuna no lo quitais ni con agua hirviendo 😉
Azkuna for president
No nombres a Dios en vano. Yo creo que se ha hecho muy bien Bilbao Aktiba, lucha contra la privatización en la que el PNV y PP coincidís, y el único euskaldun en los plenos Jon Aritz Bengoetxea, por no decir la compra del concejal-vendido.