Vitoria, 11 ago (EFE).- El secretario de Organización de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, afirmó hoy que «sin libertades individuales son imposibles las libertades colectivas», en respuesta a la intervención de ayer de Arnaldo Otegi al término de la manifestación de San Sebastián.
Larreina, en declaraciones a Efe, recordó que «quien atenta contra las libertades individuales, como hace ETA, está haciendo imposible el logro de las libertades colectivas que dice defender». El portavoz de EA en el Parlamento Vasco hizo referencia a lo dicho por Otegi de que en España no hubiera habido «ningún muerto» ni «ninguna bomba» si el PNV hubiera aceptado en 1977 la propuesta de ETA de avanzar hacia un «espacio democrático y nacional para el pueblo vasco».
A juicio de Larreina, «estamos pagando políticamente las consecuencias de que ETA se siga negando a respetar y acatar las decisiones de la sociedad vasca, ya que si ETA hace 25 años hubiese optado por construir país en el día a día, en vez de hacer destrucción nacional, hoy estaríamos mucho más cerca del ejercicio efectivo del derecho de autodeterminación». Añadió que «no hay futuro para este país con el involucionismo del Gobierno Aznar y sus adláteres, que niegan en la práctica la democracia, pero con la misma claridad y mayor firmeza decimos que tampoco hay futuro con ETA, que no sólo atenta contra los derechos humanos, sino que también niega a la sociedad vasca su mayoría de edad».
«Otegi lo que debe hacer es liderar su opción política, decir claramente que es inadmisible cualquier violación de derechos humanos y sumarse a la construcción de un país por vías estrictamente políticas, desde el diálogo, el reconocimiento de la pluralidad de la sociedad vasca y sin pretender arrogarse una representación mayor que la que le da la sociedad vasca», recalcó. El secretario de Organización de EA insistió en que desde el respeto a la voluntad de la sociedad vasca y del estricto respeto a los derechos humanos «Otegi sabe que hay camino para avanzar», pero en el de la «estrategia de la violencia no hay ningún camino para avanzar, porque supone el desprecio a esa sociedad». EFE