Tenía mis dudas sobre publicar o no esta supuesta pregunta. Pero al final he decidido darle contestación pública, entre otras cosas porque quiero que esta página sea un ejercicio de transparencia y tambien un fiel reflejo de lo que pasa en nuestra sociedad, al menos en la parte de la sociedad que se asoma a esta página web. Y he de concluir que la realidad es muy positiva: de mas de 1500 personas que se han asomado a esta página web personal, solo una ha caído en el insulto o la amenaza; de unos cien mensajes, críticas y preguntas que he recibido a través del cuestionario de la página web, solo este es impresentable.
Como veis, a pesar de los intentos de algunos, la sociedad vasca es tolerante, civilizada, crítica pero respetuosa. Creo que es importante insistir en esta idea, que los arboles de una minoría nos nos oculten el bosque de una inmensa mayoría comprometida con la paz, la civilidad, la solidaridad. desde este punto de vista esta respuesta es un homenaje a todas las personas que se han asomado a esta página.
Por eso al «amigo» que ha hecho esta pregunta solo le puedo responder que no me meteré en ningún sitio, pues como persona que no cree en el empleo de las armas (hace ya un par de décadas me negué a hacer el llamado servicio militar y opté y milité en el movimiento de objeción de conciencia), sino en la fuerza de la razón, de la fraternidad humana, de la solidaridad, seguiré optando por defender aquello en lo que yo creo, pacíficamente, civilizadamente, con claridad, sin complejos ante quien, renunciando a la razón, se pone -en este caso quizá se oculta- detrás de la sufrida cabra cabra.