Larreina admite que «habrían hecho un texto diferente» y reconoce la labor de los ediles en defensa de la democracia en «un sitio difícil». VITORIA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) – El portavoz de EA en el Parlamento vasco, Rafael Larreina, se mostró hoy partidario de no «desautorizar» al alcalde y concejales de su partido en el Ayuntamiento de Eskoriatza (Gipuzkoa) por apoyar una moción en apoyo a la familia de «Anboto», ya que, a su juicio, llevaría a «equívocos» y sería «entrar en un juego partidista». Larreina admitió que «cualquier Ejecutiva regional o nacional» del partido «habría hecho un texto diferente» al que apoyaron ayer en sus electos y advirtió de que EA no permitirá que «nadie ponga en cuestión» el compromiso activo de éstos con la defensa de los derechos humanos y la democracia, más «viviendo en sitios difíciles».
El dirigente nacionalista, que compareció en el Parlamento vasco para explicar el posicionamiento de EA sobre el conflicto de La Naval, alertó de que «no es bueno» utilizar este tipo de cuestiones -en alusión a la moción de Eskoriatza- «como elemento de agresión interpartidista», ya que, según dijo, «no es legítimo» y supone «practicar el juego sucio». «No es responsable de un partido político que tenga un compromiso activo contra el terrorismo y que no quiera entrar en el juego, precisamente, de quienes quieren estar apoyando el terrorismo», insistió. Por todo ello, aseguró que la posición de EA es «clara» y reconoció que «si esa moción hubiese salido de los órganos del partido, de cualquier Ejecutiva regional o nacional, hubiese sido diferente».
«Pero no se confundan las cosas», remarcó, al tiempo que consideró inapropiado «desautorizar» a sus alcaldes y concejales, a quienes mostró su total apoyo. «Por encima de si los textos son más o menos apropiados, tengo que decir que todos y cada uno de los concejales de EA, empezando por el alcalde de Eskoriatza, tienen un compromiso claro e inequívoco con la defensa activa de los derechos humanos, en contra del terrorismo de ETA y de cualquier otro terrorismo, con la defensa de la pluralidad de este país y, por lo tanto, un compromiso de apoyo a cualquier responsable de cualquier partido político que se pueda ver amenazado o pueda sufrir los vetos de las violencia o el terrorismo», subrayó.
Así, consideró que «desautorizar» a sus concejales llevaría a «equívocos» y a entrar «en un juego partidista, que es un juego sucio en el que creo que no se debe entrar entre las fuerzas políticas, cuando está de por medio el terrorismo y el necesario consenso en contra del terrorismo». En este punto, lanzó una advertencia a «quienes quieran utilizar este tipo de sucesos o actuaciones como elemento de agresión interpartidista» y aseguró que EA no permitirá que «nadie ponga en duda el compromiso firme e inequívoco de nuestros concejales en contra del terrorismo de ETA y con la defensa de los derechos humanos». Tras reiterar «con total claridad» que él «habría hecho una moción diferente, señaló que puede haber «expresiones más o menos afortunadas en determinadas mociones», según añadió, «fruto de la situación y de las circunstancias concretas que se dan en todos los puntos de este país y afectan a todos los partidos políticos».
«TENSIí“N» EN ESKORIATZA
Larreina insistió en que una cosa es criticar la moción y otra «descalificar» a unos alcaldes y concejales que «siempre han condenado el terrorismo» y «están defendiendo la democracia día a día en sitios difíciles, viviendo en sitios difíciles». «Es gente que merece nuestro respeto, nuestra consideración y nuestro apoyo», destacó, al tiempo que apuntó que «hay otra gente que puede estar defendiendo la democracia, pero que no vive en esos sitios difíciles». «Si es desagradable y duro aguantar tres horas de reunión en un ayuntamiento con muchas presiones e insultos, o la duración que puedan tener plenos conflictivos, mucho más difícil es vivir las 24 horas del día, los siete días de la semana, los 31 días del meses, los 12 meses del año en ese sitio, defendiendo día a día, cada segundo la democracia y las libertades», sentenció, para concluir que, por todo ello, su partido quiere «reconocer la labor» de éstos y no cuestionarla «por un texto que pueda ser desafortunado en un momento concreto».