Larreina ha calificado de «prioritario construir la Euskadi de la soberanía», defendiendo el «plan Ibarretxe» y lamentando que no se haya celebrado ya la consulta a la ciudadanía. El portavoz de Eusko Alkartasuna, Rafel Larreina, ha reiterado la apuesta de su partido por la construcción «de la Euskal Herria de la soberanía» asegurando que «el autonomismo forma parte del pasado» y que se ha abierto una nueva etapa política en la que «la voluntad de la ciudadanía vasca será la que marque el futuro». En su intervención en el debate de política general que hoy se celebra en el Parlamento vasco, Larreina ha asegurado que su partido seguirá trabajando por llevar a buen puerto el plan Ibarretxe, «sin admitir modificaciones que desvirtúen la claridad que deben tener los dos conceptos de territorialidad y soberanía».
Ambos, según ha insistido, deben constituir la base sólida sobre la que sustentar el nuevo marco jurídico-político, «que ha de ser el instrumento eficaz para lograr la normalización política y la pacificación de nuestro país». «Misma política negadora» El parlamentario de EA ha repasado la situación política, advirtiendo que a pesar del cambio de Gobierno en Madrid el «talante del sr. Zapatero supone la misma política negadora de derechos y libertades que el PP, pero sonriendo». Larreina ha asegurado que «cuanto más se avance en la construcción nacional más lejos se llegará también en la construcción social».
En este sentido, ha recordado a los socialistas su responsabilidad en el conflicto de La Naval. Larreina, finalmente y dirigiéndose a Ibarretxe, ha comprometido el apoyo de su partido para «profundizar en el autogobierno y posibilitar que la ciudadanía vasca decida su futuro, ejerza el derecho de autodeterminación, para conseguir una sociedad más justa, más progresista».