El secretario de Organización de EA, Rafael Larreina, señaló que la reforma «es una de las propuestas que nosotros hicimos en su día», aunque afirmó que, «cuando se plantea como un limitado derecho de veto, al final puede quedarse como una mera operación de imagen».
El portavoz de su grupo parlamentario de EA en Gasteiz, afirmó que la propuesta «puede quedarse en un paso pequeño que no aborde el problema de fondo, que no pasa por derechos de veto, sino porque se reconozca el derecho de autodeterminación como elemento básico para poder poner fin a la transición democrática». «Veto sin limitaciones» Larreina sostuvo que «hay que reconocer la soberanía originaria» y, en el caso de Euskal Herria, «es básico reconocer el derecho de autodeterminación y un derecho de veto efectivo y sin limitaciones en aquellos ámbitos en los que tiene razón de ser esta soberanía».