Larreina se muestra abierto al diálogo «democrático» que «busque consenso, respete la pluralidad y defienda los derechos humanos’. El secretario de Organización de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, consideró hoy «un hecho positivo» que la izquierda abertzale proponga «mantener un diálogo abierto y sin exclusiones». No obstante, censuró que «echamos en falta» la alusión en el documento presentado ayer en Pamplona a la necesidad de que «desaparezcan las actuaciones violentas de ETA, vulneradoras de los derechos humanos».
En declaraciones a Europa Press, aseguró que EA está abierta al diálogo, «como hemos estado siempre abiertos al diálogo democrático que pretenda alcanzar nuevos consensos políticos, respete y defienda la pluralidad y los derechos humanos». Larreina subrayó el hecho de que desde la izquierda abertzale se realice un llamamiento al diálogo, si bien matizó que «si estamos donde estamos no es precisamente por sus esfuerzos, sino por los que hemos realizado otros en el pasado y hay que recordar que hace 12 años EA fue expulsada del Gobierno vasco por defender el derecho de autodeterminación, y hoy es el Gobierno Vasco el que promueve un nuevo marco jurídico en el que se incluye el derecho de autodeterminación».
El portavoz de Eusko Alkartasuna señaló que «nos parecen positivos todos los esfuerzos que se hagan por las vías pacíficas y democrácticas para avanzar hacia un nuevo marco jurídico-político» y, en este sentido, destacó que en la declaración política de la izquierda abertzale «sigue habiendo ausencias».
«QUITAR OBSTACULOS»
De esta manera, indicó que, si bien en el documento «no hay ninguna justificación de la estrategia de la violencia y, aunque sea por omisión, ya es un paso positivo, echamos en falta que haya una decisión de comprometerse en la defensa de los derechos humanos y su exigencia». A su juicio, éste «es otro elemento necesario para cambiar la situación política y hacer posible que un nuevo marco jurídico-político para Euskal Herria sea una realidad y pongamos, por fin, punto final al conflicto político de fondo y lo resolvamos». Para ello, argumentó que es «importante» que desde el Gobierno vasco se defienda de forma explícita el derecho de autodeterminación, pero también es necesario para «quitar obstáculos a que el derecho de autodeterminación pueda ser una realidad» la desaparición de «la violencia y el terrorismo, de la actuación de ETA».