Uno de los peligros evidentes de la democracia, es la democracia formal; en otras palabras, reducir la democracia a algo mecánico (echar una papeleta en una urna), periódico (cada cuatro años), y que gesstionan los «políticos». Este peligro se combate con la responsabilidad de cada ciduadano, cada ciudadana, que debe asumir la gestión de los asuntos públicos en su ámbito más próximo -barrio, localidad, municipio, empresa- y también en los ámbitos más lejanos tomando parte activa en organizaciones políticas y sociales.
Esto que es muy deseable y suena muy bien, la verdad es que es dificil de llevarlo a la práctica, pues la experiencia nos dice que nos hay mucho compromiso a la hora de participar. Creo que todos -especialmetne los que estamos mas directamente implicados en la política institucional- tenemos que hacer un esfuerzo para fomentar la participación en los asuntos que constituyen la actividad pública. Desde ese punto de vista a mí me gustaría un sistema parecido al suizo, en el que la consulta es un instrumento habitual y normalizado de la acción política institucional.
Para cuando? me decías; pues la verdad es que es dificil darte un plazo. Creo que hace falta cambiar la mentaldiad de todo el mundo -sociedad y políticos, que al fin y al acabo son reflejo de esa sociedad- para que podamos llegar a un sistema autogestionario en el que todo el mundo esté dispuesto a asumir la responsabildiad de gestionar mas directamente el ámbito comunitario. Como todo habrá que empezar poco a poco, de forma didáctica para que la gente se vaya animando y el mundo institucional lo vea sin recelos, con normalidad.
Creo que una buena iniciativa y experiencia lo constituyen los NIP (núcleos de intervención participativa); en algunos municipios gestionados por Eusko Alkartasuna (Agurain, Idiazabal,..) se han puesto en práctica y han constituido una muy buena experiencia de participación popular a la hora de tomar decisiones en dichos ámbitos muncipales. Creo que si generalizamos la utilización de este instrumento, avanzaremos hacia una mayor profundización en la democracia, fomentaremos una mayor participación social, y comenzaremos a andar por la vía de la autogestión.